miércoles, 18 de junio de 2008



Yo te hago
cuando quiero,
de la forma que más
me conviene,
como más me gusta,
como mejor te prefiero.

Yo te hago y es verdad
que no siempre me sales bien,
a veces corta,
otras rara,
otras me sales por peteneras.

Pero al final
tú vas y me sales.

Porque te quise,
porque dudé de quererte
como eras, una idea,
te hice.

Yo te hago
y tú sales.
Y luego sales con otros
que, como no te hicieron,
no siempre saben cómo eres.
Menos aun cómo estás hecha
ni de qué.

Aun así hay a quien
le gustas y me lo dice.
Y nos bañamos en lisonjas
de gloria de bar
de mala muerte.

Y tú, que me saliste,
sales con nosotros.
Y no debes explicarte
muy bien qué haces allí
en boca de unos pocos
locos borrachos.

Y te violenta que
hablemos de tí y
te asustas y huyes y
te refugias en palabras
sueltas que eliges al azar
y te reinventas con ellas.

Y empujamos la noche
y empujamos para entrar
la puerta de mi casa.
Y me quito los zapatos
y te sacudo el olor
con el que no te hice.
Y me lavo los dientes.
Y te registro los bolsillos
y encuentro palabras
que guardaste que
no son mías,
que no es que estén mal,
entiéndeme querida,
pero yo te quiero como
me saliste,
como yo te hice,
poesía [o como quiera que te llames].

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Joder tron me estabas asustando, y yo pensaba que como ibas a escribir sobre eso, a la mitad ya me fui dando cuenta que era un oscuro pensamiento mio, menos mal que alivio...

Molaaaaaa!!!!

Tu amigo pong... ;-)

Anónimo dijo...

¡¡¿Pensamientos oscuros ... tú??!!!
anda yaaaaaaaaaa

:-)

Anónimo dijo...

¿ Poesía es nombre de mujer ... ?

Anónimo dijo...

No sé si es nombre de mujer o siquiera si es mujer pero ... huele, huele a mujer que aturde, como todo, como siempre.

Anónimo dijo...

Te sale, te sale a ti, y te sale muy bien. A lo que huela, a lo que sepa, o el nombre que se le quiera dar,... qué más da. Nos sirve a todos. Cómo quieras llamarte ahora, mil besos, y felicidades, me ha encantado.